Domingo de cine: La vida secreta de Walter Mitty

Ay... domingo... día de resaca para muchos o simplemente un día en el que nos apetece darnos un homenaje a nosotros mismos desconectando completamente de la realidad, tranquilos en el sofá. ¿Qué mejor opción para ello que ver cine hasta perder la vista dejándote llevar entre universos de fantasía? Para hacértelo más fácil, nosotros te recomendamos alguna peli entretenida que ver en esta nueva sección de nuestro blog: Domingo de cine.

La vida secreta de Walter Mitty

de Ben Stiller

Qué mejor peli para desconectar que la historia de un hombre que pierde el contacto con la realidad para soñar despierto (o como dirían algunos amigos "se queda empanao") a cada instante. 

Duración: 114 minutos

País: Estados Unidos

Año: 2013

Walter Mitty, encarnado por Ben Stiller,  no es ni mucho menos un espía o un héroes sino un tímido empleado de una revista que se pierde entre pajas mentales. Su vida dará un giro cuando su empleo comienza a peligrar y, con ayuda de una nueva compañera de trabajo, emprende una nueva aventura con el objetivo de salvarlo.

Deja de soñar. Comienza a vivir.

"La vida secreta de Walter Mitty" está encuadrada en los géneros de aventura y comedia, aunque te advertimos que no esperes ninguna carcajada con ella. Sin embargo, sí que te puede llegar a emocionar haciendo que desarrolles cierta simpatía por el protagonista o incluso te sientas identificado con él. Es una película sencilla y bien explicada que nos invita a reflexionar. Sobresale en este sentido los minutos que aparece en pantalla Sean O'Connell, interpretado por el actor Sean Penn, en la que nos invita a saborear nuestra vida y atesorar los recuerdos en nuestra mente antes que a guardarlos en forma de fotografía. Si hubiera que destacar algún elemento de la película sería el concepto visual que nos ayuda a diferenciar entre fantasía y realidad por el gran contraste que hay entre ellas.

Ben Stiller quien hasta ahora en su faceta como director ha recibido críticas positivas se apunta su quinto largometraje dirigido. Este fue filmado en Los Ángeles, Nueva York, Islandia, Groenlandia y el Himalaya y contó con un presupuesto de 90 millones de dólares.